
Rem koolhaas me ha recordaddo varias cosas:
solamente la ausencia provoca reflexión, que la arquitectura más rica es la que genera discusión a partir de las ausencias más que de las presencias.
la belleza de Europa es única porque no es simplificable debido a su inmensa complejidad. esto me hace pensar en lo fácil que es ser distinto aquí, mientras más simple eres eres más extraño y por eso te tienen más miedo.
existe una tendencia propiamente humana a cambiar todo lo que está quieto, es decir a luchar contra la estupidez, romper todo estado de quietud, en esta medida los diseñadores y arquitectos somos los principales protituidores del concepto ya que hemos intentado convencer al mundo que cualquier tontería nueva es mejor solo por el hecho de haber cambiado y no es cierto, de entrada solamente el romper la cotidianidad muchas veces es nocivo...pero la realidad...el fondo...está mucho más lejos y es mucho más complejo, el problema es que solo el conocimiento te aclara y cuanto mas sabes, más comprendes, menos te sorprendes y más pretendes, por tanto te alejas más de la felicidad.
El único antídoto para ello es aprender a gozar de instantes mágicos, que son muy pocos. El resto casi que realmente es pura tontería.
ahí estamos en ese aprendizaje.